¿Qué es una «casa contenedor»? Se vende en Mercado Libre y se puede pagar en cuotas
Este es el modelo de casas que está ganando popularidad y que ofrece una alternativa amigable con el medio ambiente.
*4 de junio de 2025*
*14:05*
*Tiempo de lectura: 4 minutos*
Los containers marítimos son reutilizados y reformulados como viviendas. En un mundo donde todo se puede comprar por internet, los productos que parecían imposibles de vender en este formato, también se suman al comercio electrónico. Se trata de las “casas contenedores”, viviendas construidas con una estructura basada en contenedores marítimos reciclados, que producen unidades habitacionales ecológicas que incluso se pueden conseguir en Mercado Libre.
Estas casas reutilizan los contenedores que usan los barcos para transportar mercancía y se pueden comprar a través de la plataforma de e-commerce creada por el empresario argentino Marcos Galperín. En la plataforma figuran casas que arrancan en US$2400, otras que promedian los US$24,200 y algunas que llegan hasta los US$35,000.
Entre las ventajas que resaltan este tipo de viviendas, se encuentran los plazos cortos de entrega, ya que pueden estar listas en seis meses o incluso menos. También destaca el hecho de que son estructuras recicladas, lo que reduce la contaminación ambiental, ya que dan un segundo uso a una estructura existente que, de otro modo, se desecharía. Además, estas casas son resistentes, hechas de acero preparado para soportar inclemencias climáticas en los viajes por mar, y tienen la posibilidad de ser transportadas.
No es menor el hecho de que pueden agregarse otros módulos al original, lo que permite ampliar la vivienda cuando se necesite; además, pesan menos que una casa de hormigón o de acero convencional.
En Mercado Libre, actualmente, se pueden encontrar publicaciones desde $12,000,000 hasta $23,000,000. En dólares, se publican avisos desde US$2400 para un contenedor estándar de 20 pies personalizado, pasando por US$24,000 con 30 m² hasta US$130,000 con 70 m² y tres ambientes.
Mercado Libre no es el único que las vende, ya que Amazon también ofrece viviendas prefabricadas hechas con contenedores marítimos. Una de ellas es Rainmule, que se vende por €15,000. Sin embargo, en el caso de esta plataforma, hay que tener en cuenta el costo de traslado e ingreso al país.
Especialistas del sector advierten que el contenedor fue diseñado para transportar productos en un barco, no para vivir. “Es una cáscara de metal que refleja el sol, en la que entra agua y acumula calor, que estructuralmente no está aprobado ni verificado por normas de cálculo, por lo que usarlo como casa no es un buen destino”, explica Lucas Salvatore, presidente de Idero.
Un primo hermano lejano: las casas modulares
Otros inmuebles que se construyen por módulos, aunque están diseñados específicamente para vivienda y cuentan con algunas ventajas mayores, son las casas modulares. En un contexto en el que la posibilidad de tener una casa propia vuelve a surgir entre las conversaciones de los argentinos, dado el resurgimiento del crédito hipotecario, muchos se preguntan qué tipo de vivienda conviene comprar.
En este momento, el costo de construcción ha aumentado un 126% desde octubre de 2023, generando inquietud sobre qué se puede adquirir o construir a precios accesibles, pero manteniendo la calidad.
Las casas modulares (que no utilizan un contenedor marítimo como base estructural) están tomando protagonismo. Estas viviendas se construyen a través de la fabricación en serie, similar a lo que se hace en la industria automotriz. En lugar de ir al terreno y levantar la casa poco a poco, se construye casi todo en una fábrica, desde la generación y armado de la estructura, hasta las terminaciones finales. Una vez lista, se transporta en partes al terreno donde se ubicará.
Los costos de levantar una casa con tecnología modular están en el mismo nivel que la construcción tradicional. Sin embargo, debido al volumen que pueden adquirir al construirse en serie, en algunos casos se encuentran entre un 20% y un 25% por debajo de una casa tradicional económica, manteniendo todas las ventajas que ofrece esta tecnología.
A pesar de la variedad de opciones, muchas de sus ventajas son compartidas: brindan una calidad más controlada, se fabrican en planta lo que permite una precisión de 2mm, tienen mayor velocidad de ejecución (en algunos casos, se levantan en dos meses), utilizan un proceso más sustentable con menor impacto ambiental y pueden hacerse con materiales reciclables casi en su totalidad. A diferencia de las casas contenedores, cuentan con muros diseñados para lograr una buena aislación térmica y dimensiones adecuadas para habitarlas.
*Fuente: LA NACION*